Con la llegada de las altas temperaturas, el cuidado de tus mascotas se vuelve aún más importante. Sabemos que cuidas de tus animales a cada paso, sin embargo, durante el comienzo del verano, debemos estar atentos.
Si tienes gatos, sabrás que existe la posibilidad de que sufran problemas como los golpes de calor, por eso, en nuestro blog te ayudamos a evitar que tu pequeño felino no sufra en exceso y no pase calor en los próximos meses.
Busca la temperatura ideal para tu gato
Empezaremos por encontrar la temperatura ideal para que nuestro gato se sienta cómodo dentro de casa. Como ya sabes, muchas veces buscan los rayos del sol para disfrutar del calor, o por el contrario, se tumban en la sombra donde sienten el frescor, cerca de algún lugar en el que haya corriente.
En esta época, es importante vigilarlos al máximo cuando estén al sol, ya que una sobreexposición puede dar lugar no sólo a golpes de calor, sino a quemaduras que pueden ser complicadas de curar si no se detectan a tiempo. Por ello, te damos como consejo que lo protejas y evites las zonas en las que el sol da demasiado, o incluso si tienes terraza, cuida que haya suficiente sombra para que puedan tumbarse sin ningún tipo de problema.
Aunque parezca algo obvio, tampoco es recomendable dejar al gato encerrado en espacios o en estancias que sean demasiado pequeñas y que no estén bien ventiladas.
Cuida su alimentación y su bebida
Tal y como haces a lo largo del año, cuidar la alimentación y el bebedero de tu gato será también una de las tareas que debas hacer ante las altas temperaturas.
De esta forma, además de proporcionarle a tu felino un lugar de descanso sombreado y fresco, deberás poner a su disposición más de un bebedero que tenga agua limpia y también fresca. Otra idea son las fuentes de agua corriente para gatos, que hoy en día puedes encontrar de manera fácil.
En cuanto a la comida, no le des de comer en horas de máximo calor (desde las 14:00 a las 16:00 aproximadamente), de tal forma que no se fatiguen en exceso.
Presta atención al pelaje de tu gato
Los gatos cuentan con un pelaje muy especial y si durante el invierno es importante su cepillado, en verano se trata de un ejercicio imprescindible.
El calor, en combinación con su pelaje, puede generar una sensación de malestar que, en combinación con diversos factores, da lugar a la caída de pelo. Por ello, será necesario cepillarlos a diario y evitar que traguen demasiado pelo, así también podrán sentirse más fresquitos.
De igual forma, insistimos en que lleves a cabo un cepillado preciso y no lo rapes, ya que su pelo hará que pasen mejor el calor y no cuenten con problemas que puedan complicarse con el paso del tiempo.
¿Cuáles son los síntomas de un golpe de calor en un gato?
Percibir un golpe de calor en los gatos es fácil debido a los síntomas. Por lo general, si tu mascota ha estado expuesta a altas temperaturas, contará con el pulso acelerado y con jadeos demasiado exagerados.
De igual forma, físicamente su temperatura corporal puede ser elevada, y encontrarse por encima de los cuarenta grados centígrados. Asimismo, el malestar puede provocarle vómitos e incluso una gran dificultad a la hora de andar.
Por otro lado, notarás que no quiere andar y que se encuentra muy cansado, por lo que todo ello serán señales claras de este problema.
- Aprende a tratar los golpes de calor
Si crees que tu gato puede estar sufriendo un golpe de calor, es necesario que lo lleves al veterinario con urgencia.
Aun así, con carácter urgente, llévalo a un sitio fresco y evita que su temperatura siga subiendo. Mientras tanto, otra recomendación es que humedezcas las zonas más importantes como su cabeza o el cuello, para que no sufra daños cerebrales en caso de que sea grave.
Una vez cumplidos estos pasos, también puedes humedecerlo por completo hasta notar que su respiración se calma poco a poco, o puedes ayudarte de un ventilador o incluso el aire acondicionado.
¿Qué gatos son propensos a sufrir las altas temperaturas?
Como es normal, los gatos más propensos a sufrir un golpe de calor son aquellos que tienen edades más avanzadas, o los enfermos, debido a que sus sistemas se encuentran más dañados de lo habitual.
Otra curiosidad es que los gatos negros -al absorber más calor por su color- tienen un mayor riesgo a sufrir este problema, por lo que están más expuestos.
Por último, como ya sabes, es necesario cuidar la alimentación de tu felino en todo momento ya que un gato obeso contará con un riesgo aún mayor e incluso podría sufrir un paro cardíaco.
Deja un comentario