Desde mi tronera, liturgia y pasión de una devoción heredada.

El 12 de Septiembre de 2020 en las Instalaciones de Cereales Mendez, en Lora Del Río, tendrá lugar la presentacion del libro de D.Jose Ramos Zarallo.

TÍTULO: DESDE MI TRONERA, LITURGIA Y PASIÓN DE UNA DEVOCIÓN HEREDAD.

TEMATICA: TRATADO DE LA PERDIZ CON RECLAMO.
COMPENDIO: Bilogía ilustrada de aprox. 700 páginas en cada volumen.
AUTOR: José Ramos Zarallo.

Primavera 2020
Prologuistas Vol. I: Álvaro Heras Tabernero y Faustino Mtez Molina

En septiembre verá la luz el volumen I de esta bilogía que la hace única en su género dado que la Literatura Cinegética Española no dispone de un tratado acorde a los tiempos modernos desde el 1902, fecha en la que se publicaron los libros del A+B y Diego Pequeño.

• Por una simple cuestión de marketing de la Editorial, el II volumen saldrá por Navidad.

En ambos volúmenes, se habla de la situación por la que está pasando la afición hasta este inicio de 2020, en la que España camina por otros derroteros, muy diferentes a lo que siempre fueron nuestras tradiciones y manera de vivir.

Pero veamos parte del contenido de uno de los prólogos.

<<Aborda Pepe esta obra desde la perspectiva que le da ser un poeta del campo en general y del reclamo en particular, en esencia, un tipo peculiar del que, como dije un día, si no existiese, habría que inventarlo. No me corresponde a mí ni sería ético por la falta de objetividad que la afinidad impone, hacer una glosa de su figura que se me antoja elogiosa.

Sí diré que el disco duro de su memoria almacena un sinfín de vivencias perfectamente datadas y prolijas en pequeños detalles que denotan su capacidad de análisis y observación. Tal y como se me ocurrió definirlo un día, es nuestro autor un tipo peculiar y escaso, diría que en peligro de extinción y a cuya personalidad suma una tremenda facilidad narrativa vinculada a una memoria privilegiada. Si a esto unimos un sinfín de vivencias relacionadas con nuestra modalidad dado el tiempo que por sí y por tradición le ha dedicado al reclamo, el resultado no puede ser más que la obra que tenéis entre manos.

Este libro tenía que ser, tarde o temprano, tenía que ser. Estaba ahí encerrado y había que pasarlo a papel para disfrute de todos. Lo contrario, solo cabría calificarlo como egoísmo, lo hemos hablado en multitud de ocasiones, paseando en busca de las pistas del cochino grande o viendo la manera de entrarle a la tropa de reses sin que nos sacasen, frente a la lumbre de la chimenea con una copa en las manos o de camino al puesto, había que parirlo porque no hacerlo sería privar de una deliciosa e instructiva lectura a muchos devotos de esta modalidad y que, con su memoria, se perdieran tantas y tantas vivencias dignas de ser compartidas. Como dice un viejo aserto oriental, «la tinta más clara es mejor que la mejor de las memorias». Solo era cuestión de tiempo, tiempo para ordenar ideas, tiempo para escribirlas, tiempo para pasarlas a papel… Tiempo.

Todo en nuestra modalidad se circunscribe en torno a una gallinácea de alrededor de medio kilo, todo en torno a su carácter y comportamiento, su instinto territorial y la defensa de su hembra. Su selección como reclamo la hacemos nosotros, pero su valía depende de ellos, tenemos poco protagonismo no pudiendo hacer nada en caso de que el reclamo no presente aptitudes, pero sí podemos malograr a los que sí albergan algo y no sabemos interpretarlo. Pensar que podemos convertir en un fenómeno a un maula vacío es engañarnos, no hay doma ni enseñanza que vaya más allá de acostumbrarlos a nuestra presencia, esto lo sabe Pepe, que les da las oportunidades justas y que no deja de tirar de vista clínica para, según ciertos signos del carácter en el jaulero, errar lo justo y ¡a fe de Dios que lo consigue! La observación, unida a la perspicacia y la capacidad de análisis, deben de jugar una suerte de sabiduría infrecuente.

La obra de Pepe ensalza a nuestra protagonista en su justa medida, ya sea llenando de alabanzas a aquellos reclamos memorables que ya van indefectiblemente anclados a nuestros recuerdos o dando trigo y agua de la memoria a tanto y tanto mochuelo porque, no nos engañemos, estos segundos son muchos más (eso de «se mueren los mejores» no deja de ser una muletilla, ya que se mueren los mejores, los peores y los medias cucharas, lo que ocurre es que unos mueren en parte porque los recordamos siempre y a los otros los desterramos de la memoria en el mismo momento de deshacernos de su medio kilo físico).

Hay en estos libros vivencias que parecieran ensoñaciones, historias que nos sacarán sonrisas, anécdotas que nos resultarán familiares, reclamos que parecerá que han sido parte de nuestros jauleros y personas que hubiésemos querido que formasen parte de nuestras vidas. Por todo ello, su lectura nos resultará enriquecedora y gratificante, nos llevará a un mayor conocimiento del autor y de su entorno, que con un particular estilo narrativo-descriptivo, dará respuesta a muchos interrogantes. Como Pepe suele decir, «para que se produzca un aprendizaje, hacen falta dos voluntades, la voluntad de enseñar y la voluntad de aprender»; y con este libro, se aprende, ¡vaya si se aprende!, eso sí, mientras haya voluntad.

Disfruten
ALEA IACTA EST. >>